Reflexiones cobre el VI Congreso del P.C.C.

Después de años de espera, Raúl Castro lanza la convocatoria al temido VI Congreso del Partido. Digo temido, pues peligrosamente la mal llamada Constitución Socialista de la República de Cuba, designa al Congreso del Partido como la actividad más importante del Estado. Así las cosas, teóricamente esa reunión pudiera dar al traste con las pretensiones de los Hermanos Castros de convertir a Cuba en una Monarquía en la que a la jefatura del estado solo se puede llegar si naces en una cuna con sangre azul.

Resulta intrigante a que se refiere Raúl Castro cuando utiliza la palabra actualizar el sistema socialista cubano. Si recientemente a su hermano Fidel Castro le escapó esa expresión sincera de que el Sistema no funciona, como es que se trata de actualizar una cosa que no funciona y que no ha funcionado en medio siglo en Cuba. Yo estoy acostumbrado a que cuando conecto mi ordenador a internet, cada cierto tiempo Microsoft me anuncia que está disponible una actualización, me la descargo y mi ordenador que funcionaba sigue funcionando mejor o peor, pero sigue funcionando. Pero, yo no me imagino que clase de actualización puede hacer funcionar a algo que no funciona.

Hay una cosa que destacar, los que sean escogidos como delegados a ese Congreso tienen una responsabilidad muy seria, deben ser capaces de defender o traicionar los intereses de los cubanos. Ellos saben que los disidentes cubanos y los presos políticos no son ni la única ni la más importante oposición a la Dictadura. Ellos saben que la oposición más importante a la Dictadura está en los ciudadanos de a pie, que todos los días están viendo que mientras al pueblo se le exigen los mayores sacrificios, los dirigentes y sus familiares no se les limita ni uno solo de sus privilegios. Por medio siglo han sido testigos de que la promoción a los altos cargos de dirección del estado no se ha debido al mérito laboral y profesional de los ciudadanos; sino a ser hijo de un alto dirigente o haber guataqueado considerablemente a uno de esos dirigentes. Esa es la razón de que surgen cuadros que ocupan cargos para los que son incompetentes. Esos cuadros gestionan ineficientemente los recursos de la sociedad, arruinan al país, pero como pertenecen a una casta real siguen en los mismos cargos o son pasados a otros cargos de igual o mayor importancia, donde se les permiten que vuelvan a arruinar al país.

Como algo novedoso de los últimos tiempos, Raúl Castro, argumentando una u otra razón se ha encargado de cargarse a todos los cuadros principales que habían surgido en época de su hermano y de esa forma ha llevado a un grupo de Generales amiguetes a los puestos claves del estado; dejando bien claro que los mayores privilegios son para sus amigos de las Fuerzas Armadas. Para los ciudadanos civiles que sean designados como delegados a ese Congreso debe estar muy claro que sus méritos no cuentan para nada dentro de los Planes de Raúl Castro.

Así las cosas, de aquí a la celebración de ese Congreso, que lo más probable es que no se celebre, la situación económica del país se continuará agudizando. Cientos de miles de trabajadores del estado serán despedidos de sus centros de trabajo y serán lanzados a la calle sin la más mínima indemnización. Pero además son despedidos con el claro conocimiento que el estado que los amamantó durante medio siglo no va a dar ningún paso para la creación de empleos en donde puedan ganarse la vida. Simplemente se les despide, se les da un listado de trabajos por cuenta propia para los cuales pueden pedir una licencia que tendrán que pagar primero. Y antes de preocuparse en que condiciones reales podrán trabajar de esa forma se les lanza un sistema impositivo severo, que además es muy fácil de burlar, pues no habiendo experiencia en la recaudación de impuestos en el país, las declaraciones de la renta de los trabajadores tendrán muy pocas posibilidades de ser verificada. Luego ese paso es otro más que da la Dictadura para aumentar la corrupción en el país.

La situación dramática que confrontan los trabajadores del país al no tener organizaciones sindicales que defiendan sus intereses, sino que se pliegan al gobierno para apoyarlo en sus medidas contra los trabajadores va a agudizar el descontento que en la población ya es muy grande.

La Dictadura tiene la obligación de dialogar con los ciudadanos, está obligada a escuchar a los ciudadanos. Es vergonzoso que la Dictadura continúe ninguneando a los cubanos. Los cubanos tenemos el derecho de diseñar un país en el que todos quepamos. No importa donde vivan los cubanos, si en la isla o en el extranjero. Cuba le pertenece a los cubanos, quiera o no quiera Raúl Castro y sus compinches. Para sacar a Cuba del hueco en que lo ha metido la Dictadura en este medio siglo se necesita la colaboración de todos los cubanos. Antes que convocar a un Congreso del Partido (que no le ha resuelto ningún problema a los cubanos), la Dictadura está obligada a convocar un diálogo entre los cubanos. La Dictadura está en el deber de crear las condiciones para que los cubanos dentro de la isla tengan la posibilidad de expresar sus opiniones con entera libertad. La Dictadura está en el deber de garantizar que los cubanos de la isla puedan recibir información de diferentes fuentes y puedan contrastar su veracidad.

No se puede hablar de democracia de ningún tipo en Cuba si no se le entrega la soberanía a los ciudadanos. Un grupúsculo apoderado del poder no puede sentirse el propietario de la verdad, lanzarla como un dogma a la sociedad y amenazar a los ciudadanos que no estén de acuerdo con su proyecto de traidores mercenarios, por el solo hecho de tener otra opinión no contribuye a la solución del problema cubano.

La Dictadura tiene que entender que los cubanos están desarrollando una Huelga General que tendrá paralizado al país hasta que los ciudadanos no tengan la posibilidad real de trabajando fuerte sacar a su familia adelante, lograr la mejor educación de sus hijos, poder tener unos servicios de salud eficiente cuando estén enfermos y al final de la vida poder contar con una jubilación digna.

Tres preguntas: para Raúl, Zapatero y Obama.

Hace un par de años, un grupo de intelectuales cubanos empezó a trabajar por un proyecto de transformación democrática de la sociedad cubana de forma pacífica en donde se proclamara una Cuba sin exclusiones, una Cuba donde quepamos todos los cubanos independientemente de su ideología. Un país que dejara atrás las lacras de un régimen totalitario irresponsable e improductivo que había arrastrado a nuestro país por un sendero de corrupción inmovilista que había destrozado los patrones morales de nuestra sociedad.

Teníamos alarma y hoy la tenemos más que la controversia entre los históricos de ambos lados: los utraizquierdistas de la Habana y los ultraderechistas del exilio, emponzoñaran el odio entre cubanos y terminaran llevándonos a una cruenta guerra civil de proporciones nunca imaginadas en nuestro pueblo.

Pensábamos entonces que la grave enfermedad de Fidel Castro y su apresurada sustitución por su hermano provocaría sensatez en es nomenclatura y que aprovechando el precario equilibrio de fuerzas con contaban condujeran a nuestro país por una transición pacífica a la democracia.

Incluso, ¨el estrenado mandatario cubano¨ al reconocer públicamente la necesidad de introducir transformaciones en la sociedad cubana estaba dándonos la razón de que algo se iba a hace. Pero los hechos no se han correspondido con las realidades. Después de tres años de presunto gobierno el General Raúl Castro tiene las cosas en el mismo lugar. En realidad la situación económica es más aguda que nunca, el descontento de los ciudadanos crece diariamente de forma exponencial. Se buscan culpables, pero no soluciones.

Algo sucede en las mentes de los ciudadanos de un país que durante medio siglo se les ha privado de recibir información de otras fuentes que no sean las oficiales. Los nacis fueron los que inventaron aquella frase de que una mentira repetidas muchas veces se convertía en una verdad. De los fascistas alemanes aprendió el actual gobierno cubano que un férreo control sobre los medios de información para los ciudadanos les permitiría sembrar en las mentes de los cubanos como verdades sus mentiras.

Pero no se percataban de una importante diferencia. Durante cincuenta años se le han estado diciendo cosas a los ciudadanos que después ellos mismos y poco a poco primero han dudado y finalmente se han dado cuenta de que son mentiras. Ejemplos son muchos y no viene al caso en un artículo de este tipo enumerarlos, pues cambiaría su objetivo.

Pero por solo poner algunos ejemplos podemos decir que la cacareada amenaza de una invasión del Ejercito de los Estados Unidos para ahogar en sangre la Revolución y devolver a los explotadores sus privilegios y que fue la justificación por la que metieron a nuestro país en la Guerra Fría, permitieron que fuera ocupado por miles de soldados de un ejercito extra continental, que nuestro país se involucrara en Guerras Africanas por varios lustros y dejara miles de vidas de hijos cubanos en tierras tan lejanas. Esa amenaza justificó que en Cuba se le diera apoyo monetario, armas y entrenamiento a cuanta persona viniera pidiéndolo para luchar contra el Imperialismo, aunque luego solo actuaran como vulgares terroristas asesinos como es el caso de ETA en España.

Una loca política económica destruyó a nuestro país. Pongamos ejemplos: El Cordón de la Habana; la Planta Termonuclear de Juraguá, las microbrigadas para la construcción de viviendas; los famosos Contingentes que comenzaron a mal trabajar la tierra que los campesinos cubanos no querían trabajar por los bajos incentivos económicos y la política monopolista del estado en cuanto al acopio de sus producciones; el desencanto de los ciudadanos revolucionarios cuando vieron que se ponían de cabeza los valores de una sociedad con la introducción de la doble moneda y veían con ojos de asombro que un médico, un ingeniero o un maestro ganaba una miseria en comparación con un taxista, un dependiente de un hotel, una próstituta o un policía.

Durante cincuenta años la dictadura ha convertido en un caos a nuestro país. Han estado pagándole a los trabajadores salarios miserables y luego hipócritamente les han estado suministrando un pequeño grupo de productos y en pequeñas cantidades mediante una libreta de abastecimiento. Les han abierto tiendas en que muchos productos de necesidad solo se venden ahí, pero en una moneda en la que ellos no reciben su salario y que si con la moneda cubana altamente depreciada los quieren adquirir tienen que emplear muchos días de trabajo para adquirir un jabón, un litro de aceite o 6 huevos.

Estas y no otras son las razones por las que tantos cubanos no ven en el trabajar para el Estado una forma de poder resolver sus necesidades. Estas y no otras son las razones por la que miles de profesionales abandonaron los hospitales, las industrias y las aulas para ir a limpiar habitaciones en hoteles, trabajar de taxistas o de prostitutas.

Decir como dijo un histórico cubano, el Señor Ramiro Valdés, que los cubanos tenían que quitarse de la cabeza que el PAPA ESTADO tenía que seguir resolviéndoles les problemas a los cubanos, insinuando que son vagos: Es una grosera falta de respeto hacia el Pueblo de Cuba. No se olvide ese señor que quien ha maniatado a los cubanos para que sean emprendedores es la dictadura. Quienes han dado margen al robo y al desvío de recursos es la nomenclatura que gobierna en Cuba. Mientras el pueblo, los de abajo, sufren miseria. Ellos, la nomenclatura, los de arriba viven una vida llena de privilegios y comodidades.

Esta realidad tiene a Cuba en una Situación de Cambio. Los de abajo no quieren seguir siendo explotados miserablemente para que los de arriba vivan una vida de opulencia, derroche y negligencia. No les suena que algo como esto lo dijo Lenin.

Y otro clásico del marxismo también dijo algo así como: que cuando los de abajo no tengan nada más que perder que no sean sus cadenas se lanzaran a la lucha resuelta por cambiar el mundo. Es decir: que en las actuales condiciones en que vive Cuba la EXPLOSION SOCIAL puede detonarse en cualquier momento.

Por eso es mi alarma por el incremento de la represión contra los disidentes cubanos, contra las Damas de Blanco, contra los jóvenes blogueros. La hordas que les han hecho los actos de repudio han sido organizadas por el aparato represivo de Raúl Castro, porque la población cubana no siente repudio alguno contra ellos, sino todo lo contrario se solidarizan con ellos y sienten que con valor reclaman por todos los cubanos.

Por eso quiero lanzarle una pregunta al señor Raúl Castro: ¿Tiene usted un proyecto real, que no esté viciado por anteriores fracasos de la dictadura, que pueda llenar de esperanzas a sus compatriotas? O ante un callejón sin salida está dispuesto a desencadenar una violenta represión sangrienta contra los cubanos. ¿Es cierto que la Seguridad del estado Cubano ya tiene confeccionada la lista de los cubanos a los que se les ejecutaría sumariamente ante el comienzo de una explosión social, si les da tiempo?

Quiero preguntarle al Señor zapatero, Presidente de España, si va a seguir callando ante el brutal incremento de las violaciones de los Derechos Humanos en Cuba como hizo recientemente su ministro de relaciones exteriores cuando estando de visita en Cuba se reunió y brindó solidaridad a los familiares de los 5 espías presos en los EEUU, pero no recibió a las Damas de Blanco que tienen a sus esposos en las cárceles cubana.

Y le pregunto al Presidente Obama. Usted ha dejado claro que para dar nuevos pasos en el mejoramiento de las relaciones con el gobierno cubano se requieren gestos de buena voluntad por parte de la Habana y valientemente usted ha hecho gestos y ha tomado decisiones para ir hacia delante. Pero, si el incremento de la represión contra los disidentes cubanos por parte del gobierno cubano continúa y se transforma en una represión violenta y generalizada contra el pueblo producto de una inminente EXPLOSION SOCIAL. ¿Estará dispuesto el Ejercito de los Estados Unidos a intervenir en Cuba para impedir una sangrienta matanza y un nuevo éxodo masivo de ciudadanos cubanos hacia la Florida?

Lo que hace falta a Cuba es tener gobernantes serios.

Con una cara más fresco que una lechuga, este Bruno Rodríguez Padilla, se llena la boca para decirle a Obama que sea consecuente con sus planteamientos.

Primero se refiere constantemente al ¨Bloqueo¨ y los Estados Unidos no tienen ningún bloqueo a Cuba. Señor Bruno: Un Bloqueo a Cuba implicaría tener a la isla rodeada de fuerzas militares por mar y aire y no permitir la entrada o salida al país de ningún tipo de nave de transporte, ni civil ni militar. Lo que Estados Unidos aplica a Cuba es un Embargo Comercial.

Ese Embargo Comercial, que es una Ley de los Estados Unidos y no la puede derogar el Presidente, sino el Congreso de los Estados Unidos. Tiene sus antecedentes históricos en los años 60 del siglo pasado. Cuando se aprobó esa Ley por el gobierno de los EEUU de aquella época, el actual gobierno de Cuba (son los mismos de entonces) comenzó una política de ataque casi a diario. Que Cuba nacionaliza tal industria, que EEUU le quita la cuota azucarera a Cuba; que Cuba nacionaliza la industria del petróleo que EEUU paraliza en envío de petróleo venezolano a Cuba; que Cuba recibe petróleo ruso; que se nacionalizan las compañías de electricidad, las de teléfonos, los Bancos. Que Cuba permite la invasión secreta de miles de soldados rusos a espaldas de su pueblo, de la mayoría de los miembros de su gobierno y de su constitución. Que EEUU lanza la invasión de Playa Girón. Que Cuba instala mísiles con ojivas nucleares apuntando a los EEUU; que se desata la Crisis de Octubre que puso al mundo al borde del holocausto nuclear. Que la URSS no dispara los mísiles a EEUU a pesar de la insistencia de Fidel Castro y gracias a Dios, los rusos y los americanos dejan a un lado a Fidel Castro y llegan a un acuerdo.

Luego siguió una larga historia de hechos por parte del actual gobierno cubano: Guerras en Africa, apoyo a las guerrillas de Colombia, Guatemala, El Salvador. Entrenamiento a ETA para hacer atentados. Participación de altos oficiales del Ejercito Cubano en el tráfico de drogas a los EEUU. etc, etc, etc.

El presidente Obama empezó haciendo gestos de buena voluntad. Levantó las restricciones de viajar y enviar dinero a Cuba a los cubanoamericanos. Propuso excluir del Embargo una serie de productos electrónicos. Puso como dicen los cubanos la bola en territorio, es decir pidió gestos de reciprocidad a los gobernantes cubanos, para continuar avanzando y mostrando buena voluntad. Tal fue la repercusión de los gestos de Obama que se ha convertido en más popular y querido entre los cubanos de la isla que sus propios dirigentes.

El Presidente Raúl Castro dijo en su visita a Venezuela que Cuba estaba dispuesta a discutir en pie de igualdad con los EEUU sobre todo tipo de problemas, incluyendo los derechos humanos. El Presidente Obama incluso manifestó públicamente su alegría por ese paso y de repente el Fantasma de Jaimanitas sale con su famosa Reflexión en la que le advierte al Presidente Obama que no había entendido bien: que su hermano Raúl no había querido decir lo que dijo y de esa forma mostró dos cosas: Una que en la Cuba actual había una bicefalia en la Presidencia que restaba credibilidad a las declaraciones de su Presidente y que en la dirección del gobierno cubano no había interés de crear un ambiente de distensión y buena voluntad que propiciara la derogación por el Congreso de los EEUU de la Ley del Embargo Comercial a Cuba. Que de paso en estos momentos se permite el comercio de una amplia lista de alimentos, medicinas y productos para la agricultura.

Por favor, señor Canciller cubano, yo entiendo que su posición es muy difícil. Sus dos antecesores en el cargo venían avalados por el apoyo del Fantasma de Jaimanitas y cayeron en desgracia. Y para usted con esos antecedentes es muy difícil mantenerse colgado del jamón. Pero la comunidad internacional le exige al gobierno cubano que ayude al Presidente Obama a acabar de levantar el Embargo.

Requiem por un histórico o aquí hay tomate.

En el octavo aniversario de los atentados a las Torres Gemelas en New York, en la Habana anuncian la muerte de un Comandante Histórico. No está claro si su número era el tres o el cuatro, todo depende si contamos como UNO al Fantasma de Jaimanitas. Por mi cuenta era el CUATRO, aunque Granma le adjudica el TRES. Bueno, eso de números más o menos no tiene tanta importancia. Pero algo me parece extraño, sin tapujos anuncian que falleció de un paro cardiorrespiratorio, de una simple enfermedad como la que le puede dar a cualquier plebeyo. Para un miembro de la Realeza se reservan como de costumbre enfermedades más distinguidas como ¨una larga o corta penosa enfermedad, pero nunca ellos mueren de cosas tan prosaicas como un paro cardiaco. Y luego, y eso me sorprende más, no va ha haber velorio, su cadáver no se va a mostrar como de costumbre a las multitudes que lo amaban por última vez y solo porque esa fue su última voluntad según tenemos que creerle al Buró Político del Partido Comunista de Cuba.

Hace unos días su hijo Juan Juan salió protestando con carteles en la Plaza de la Revolución para que lo dejaran ir a visitar a su médico a una consulta de una enfermedad reumática que padece. Lo sorprendente es que el señor, a pesar de que según el Fantasma de Jaimanitas, es una potencia médica, se atendía con un médico no de un hospital cubano, sino de una ciudad europea como Bruselas.

Perdónenme mi suspicacia: ¡Aquí hay tomate! Mi mente calenturienta piensa que aquí se pudo haber producido un show. Un histórico protestando porque a su hijo no lo dejaban ir a un médico en Bruselas mientras otro histórico manda a sus nietos de visita a sus abuelos a Italia. Manotazos de vejestorios sobre la mesa y algún que otro disparo. Luego el cadáver no está en condiciones de ser expuesto al público y venga comunicado extraño de que no hay velorio por puro deseo del difunto.

Por otro lado, la sucesión está cada vez más confusa. Raúl cada vez más cuestionado, el Fantasma amenazando que regresa y sin ningún escrúpulo plantean que la salud de los altos dirigentes es un Secreto de Estado. Yo me pregunto que situación de pánico provocaría en los pasajeros si una compañía de aviación mantuviera en secreto la salud de los pilotos de sus naves. Ese mismo pánico es el que debe sentir el pueblo cubano cuando sabe que los históricos que gobiernan el país tienen una salud precaria, que pasan más horas del día en manos de los médicos que luchan para alargarles la vida que en las reuniones de trabajo en que están obligados a participar para resolver los problemas del país. ¿No será que por eso es que no resuelven ningún problema a los ciudadanos?

Imagínense una reunión de trabajo de estos señores. En una mesa ocho ancianos reunidos y alrededor de ellos decenas de médicos observando sus parámetros vitales y de repente: una pausa para cambiar la bolsa de desechos fecales de uno de ellos.

A mi me recuerda estos momentos al final del inmovilismo de la Unión Soviética, cuando elegían cada tres meses a un líder del Partido Comunista porque el anciano electo anterior falleció. Y de repente vino Gorbashov y comenzó el despelote final.

¿Históricos o ultras?

Ahora a ambas costas del estrecho de la Florida les dan el mismo adjetivo: HISTORICOS. En la Habana, la nomenclatura los nombra así: Dirigentes Históricos de la Revolución. No han hecho otra cosa durante 50 años que vivir como unos reyes, malgastar el dinero del país, destrozar la economía cubana en todos los sentidos, reprimir a los ciudadanos que tengan opiniones distintas y de las más diversas maneras que van desde la simple coacción hasta los ataques de grupos organizados por el gobierno sin límites de violencia e incluso con la cárcel cruel o el fusilamiento. Estos Históricos de la Revolución quieren que todo siga igual, no les preocupa mejorar la situación económica de los cubanos porque se trata de trabajar para un país en el que saben que no van a vivir. Con descaro en el último momento desbancan de puestos importantes a las famosas generaciones formadas por la Revolución. No tienen confianza en ellas por una simple razón: son peligrosos pues les quedan muchos años de vida y saben que cuando al fin desaparezcan los Históricos, tienen la necesidad de hacer funcionar al país paralizado en el que van a tener que vivir. Y no hay que salir de Cuba para encontrar ejemplos de que lo único que a funcionado un poco han sido aquellas actividades en que por momentos se les ha permitido a los emprendedores desarrollar sus iniciativas privadas, mientras que el sector estatal mantiene su ineficiencia productiva, el derroche y el desvío de recursos.

Del otro lado del estrecho también están los Históricos del Exilio. Se olvidan que fueron ellos los culpables de que Fidel Castro llegara al poder en 1959. No lucharon cuando tenían las armas en la mano y estaban en el poder contra Fidel Castro. Se largaron de Cuba desde los primeros momentos, incluso prepararon su huída sacando dinero y joyas del país. Se fueron con la idea de que pronto volverían cuando otros derrotaran a Fidel Castro. Incluso todavía hoy le recriminan a los norteamericanos que no hayan invadido a Cuba cuando lo de Bahía de Cochinos y les hayan puesto de nuevo el poder en sus manos sin tirar un tiro. Luego se han pasado 50 años esquilmando a los exiliados cubanos, les han extraído hasta el último centavo para derrotar a Fidel Castro y con sus métodos solo han logrado que a 50 años la dictadura de los Castros esté ahí y ellos se hayan enriquecido.

Indudablemente es natural y entendible que los Históricos, que no son más que las minorías de ultra izquierda de la Habana y las minorías de ultra derecha de Miami, quieran seguir manteniendo este diferendo que tan buenos beneficios económicos les ha reportado y que tanto sufrimiento le ha provocado a los cubanos. La ultra izquierda de la Habana miente intencionadamente cuando quiere poner un signo de igual entre todos los cubanos del exilio y los acusa con su adjetivo preferido ¨MAFIA DE MIAMI¨. La ultra derecha de Miami miente intencionadamente cuando acusa a los cubanos de la isla de ser los culpables de la existencia de la dictadura porque la apoyan. Incluso acusan al exilio que no piensa igual de estar penetrado y trabajando para la dictadura desde el territorio norteamericano. Y lo que es peor que atacan con la mayor virulencia a ese exilio cubano que trabaja por un cambio pacífico en Cuba en medio de una concordia en la que quepamos todos los cubanos.
Observemos que con la mayor desfachatez atacan la política del Presidente Obama con respecto a Cuba, proclaman fracasos donde se observan importantes éxitos y tratan de frenarlo a toda costa, olvidándose que durante 50 años la política de enfrentamiento y Embargo que añoran, no dio ningún resultado positivo y la dictadura está ahí, quizás gracias a ellos.

Cada vez estamos más cerca del final de la Dictadura. Al Fantasma de Jaimanitas le debe quedar muy poco, la planeada sucesión de su hermano, tras tres años en el ¨poder¨ ha sido un fracaso, incluso reconocido públicamente por él, cuando lo desautoriza en sus ´Reflexiones¨ diciendo que Obama no entendió lo que quiso decir Raúl Castro cuando dijo lo que dijo. No es solo Lage y Pérez Roque los que piensan en la nomenclatura que Raúl Castro es un inepto para el cargo que le adjudicó su hermano. Son muchos los que ven eso desde la misma cúpula del ejercito y se dan cuenta que estos tres años son otros tres años perdidos más por los cubanos y que saben lo que hay que hacer para sacar a Cuba del hueco en que la han metido 50 años de dictadura.

Cuba está pasando por UNA SITUACIÓN DE CAMBIOS. Cada vez a los de arriba se les hace más difícil mantener el poder dominante de la sociedad que les brinda los privilegios de vivir como reyes. Cada vez los de abajo quieren menos seguir viviendo a la antigua, no quieren seguir viviendo tan mal, cada vez creen menos en lo que les dice la dictadura. Incluso, y esto tiene aterrada a la dictadura, hoy el Presidente Obama es más confiable, admirado y querido por los cubanos de la isla que los líderes de la dictadura. Eso es a mi entender es el principal éxito de la política de la nueva administración demócrata en estos seis meses de trabajo. Obama ha logrado acercar más la libertad a Cuba en estos 6 meses que el resto de las administraciones de EEUU en 50 años. Entonces debemos estar esperanzados y optimistas por el futuro.

Extraña reflexión de Fidel Castro

El 2 de septiembre de 2009, aparece en la página digital de Granma una extraña Reflexión firmada por el Fantasma de Jaimanitas.

Digo que es extraña: por su título y por algunos de sus párrafos.

Su título es ¨El fin no justifica los medios¨. Venga, ya era hora que este señor que durante 50 años de desgobierno no ha desaprovechado ningún método sucio para perpetuarse en el poder, se atreviera a usar este antiguo refrán. Este señor engañaba al mundo y a los cubanos cuando en el año 59 proclamaba que no era comunista y poco después, cuando consolidó su poder sobre la base de entregar a Cuba a una potencia extranjera como la Unión Soviética y colocar a Cuba en la primera trinchera de la Guerra Fría que muchas veces trató de convertir en caliente. Este señor fue, el que utilizó los éxodos masivos de cubanos que han convertido al nuestro en un país de emigrantes, donde es raro encontrar una familia que no esté dispersa por los diferentes países del mundo.

Son muchos los ejemplos que pueden probar que durante 50 años esa ha sido su real forma de actuar: lograr mantener su poder hegemónico a toda costa y a todo costo, sin importarle un comino la ética humana para lograrlo.

Pero lo que más me extraña de este artículo es el final de su penúltimo párrafo, donde dice: En ese caso, sería una prueba del abismo moral al que puede conducir el capitalismo desarrollado, el consumismo y el imperialismo. De ser así, debe proclamarse abiertamente y pedir opinión al resto del mundo.

Esa expresión me ha dejado perplejo, ha puesto un signo de igualdad en cuanto al abismo moral nada menos que al capitalismo desarrollado, a su COMUNISMO mal oliente y a su odiado IMPERIO. Por el amor de Dios, este señor está apunto de decir que las dos pestes más grandes de la humanidad en el pasado siglo XX fueron el Comunismo y el Nacismo, como si él no hubiera tenido nada que ver con los crímenes del Comunismo.

Yo me imagino que este artículo que en el momento de escribir este post lo puedes leer en: http://www.granma.cu/espanol/2009/septiembre/jue3/elfinnojustifica.html
Pero como ha ocurrido en muchas ocasiones, luego lo desaparecen y aparece como que nunca existió. Me voy a molestar en publicarlo integramente a continuación.

REFLEXIONES DEL COMPAÑERO FIDEL
EL FIN NO JUSTIFICA LOS MEDIOS.

(Tomado de CubaDebate)
Las noticias directas procedentes de Estados Unidos en ocasiones producen indignación y a veces repugnancia.
Desde luego que en los últimos tiempos gran número de ellas se referían a los problemas asociados a la grave crisis económica internacional y sus consecuencias en el seno del imperio. No son, por supuesto, las únicas referentes a ese poderoso país. Cualquier página del grueso volumen de noticias procedentes de un continente, región o país del mundo, por lo general está relacionada con la política de Estados Unidos. No hay punto del planeta donde no se experimente la avasalladora presencia del imperio.
Como es lógico, durante casi diez años las noticias sobre sus brutales guerras ocuparon importantes espacios de la prensa y más aún cuando estaba de por medio una elección presidencial.
Nadie sin embargo había imaginado que en medio del drama de las guerras de conquista aparecieran las noticias sobre cárceles secretas y centros de tortura, un bochornoso y bien guardado secreto del Gobierno de Estados Unidos.
El autor de la grotesca política que condujo a ese punto había usurpado la presidencia de Estados Unidos en las elecciones de noviembre del 2000, mediante fraude electoral en el estado sureño de la Florida donde se decidió la contienda.
Después de usurpar el poder, W. Bush no solo arrastró al país a una política de guerra, sino que dejó de suscribir el Protocolo de Kyoto, negando al mundo durante 10 años, en la lucha por el medio ambiente, el apoyo de la nación que consume el 25 por ciento del combustible fósil, lo que puede ocasionar a la especie humana un daño irreparable. Ya el cambio climático está presente en el incremento mundial del calor, que los pilotos de aviones ejecutivos pueden observar a través de los tornados de creciente fuerza que se forman desde las primeras horas de la tarde en sus rutas tropicales y pueden ser motivo de peligro para sus modernos Jets. Están todavía por conocerse las causas del accidente del avión de Air France que se desintegró en pleno vuelo.
Nada sería comparable con las consecuencias del descongelamiento de la enorme masa de agua acumulada sobre el continente antártico, sumada a la que se derrite sobre Groenlandia. Mi punto de vista acerca de la responsabilidad que cae sobre Bush, lo sostuve en reciente encuentro con el cineasta norteamericano Oliver Stone al comentarle su filme: «W», referido al penúltimo Presidente de Estados Unidos.
Me limito a señalar que después de los errores y horrores políticos de George W. Bush, el ex vicepresidente Cheney, que fue su consejero, enarbola la idea de que las torturas ordenadas a la CIA para obtener información estaban justificadas por cuanto salvaron vidas norteamericanas gracias a la información obtenida por esa vía.
Desde luego que no salvó las vidas de los miles de norteamericanos que murieron en Iraq, ni las de casi un millón de iraquíes, ni los que en número creciente mueren en Afganistán. Tampoco se sabe cuáles serán las consecuencias del odio acumulado por los genocidios que se están cometiendo o pueden cometerse por esas vías.
Se trata, entiéndase bien, de un problema elemental de ética política: «el fin no justifica los medios». La tortura no justifica la tortura; el crimen no justifica el crimen.
Tal principio se debatió y se sostuvo durante siglos. En virtud de él la humanidad ha condenado todas las guerras de conquista y todos los crímenes cometidos. Es de suma gravedad que el más poderoso imperio y la más colosal superpotencia que haya existido nunca proclame tal política. Más preocupante aún no es solo que el ex vicepresidente y principal inspirador de tan pérfida política la proclame abiertamente, sino que un elevado número de ciudadanos de ese país, tal vez más de la mitad, la apoye. En ese caso, sería una prueba del abismo moral al que puede conducir el capitalismo desarrollado, el consumismo y el imperialismo. De ser así, debe proclamarse abiertamente y pedir opinión al resto del mundo.
Pienso, sin embargo, que los ciudadanos más conscientes de Estados Unidos serán capaces de librar y ganar esa batalla moral a medida que comprendan la dolorosa realidad. Ninguna persona honesta en el mundo desea para ellos, o cualquier otro país, la muerte de personas inocentes, víctimas de cualquier forma de terror, venga de donde venga.
Fidel Castro Ruz
Septiembre 2 de 2009
7 y 34 p.m.

La Historia lo condenará.

Una tal Lisanka González Suarez se le ocurrió escribir un artículo que publica Granma en su página digital
Sorprende que éste artículo comience con esta frase: DESDE que esta nación caribeña comprendió que no podía darse el lujo de desaprovechar su clima de perenne verano y la calidad de sus playas, el turismo de sol y playa se convirtió aquí en la modalidad turística por excelencia.
Cuando mucho antes de que Fidel Castro secuestrara la soberanía cubana, ya las playas cubanas eran reconocidas mundialmente como fantásticas. Este periodista olvida o pretende desconocer que en 1959 ya estaban construidos y funcionando los mejores hoteles de la Habana y Varadero (Le recuerdo el Habana Hilton, el Riviera, el Capri, el Nacional, el Hotel Internacional de Varadero y un largo etc.
Le recuerdo que desde 1959 se paró de un golpe la industria turística cubana, que incluso se eliminó a los turistas que provenían de países capitalistas, porque según ese señor que hoy cumple 83 años, ese turismo que venía de las sociedades de consumo, contaminaba de forma negativa la ideología de los cubanos.
Me acuerdo una vez que estando en el aeropuerto de Gerona (Isla de la Juventud) llegó un vuelo de turistas canadienses, era 1974, no pudimos ni siquiera verlos en persona, pasaron los autobuses a la pista y los subieron en ellos. Se rumoreaba que iban a ser alojados en un hotel en la playa de Punta del Este, lejos de los cubanos.
Tuvo que desaparecer la Unión Soviética para que debido a que se quedaron sin los subsidios que les permitían financiar las Guerras Africanas y dejar de ocuparse de las tareas productivas (como la agricultura), para que entonces volvieran a tener que fijarse en que Cuba era un paraíso turístico desperdiciado. Así las cosas fue que empezaron a vender los hoteles a los españoles y comenzaron a construir a la carrera nuevos hoteles.
Pero gracias a esa política del actual Fantasma de Jaimanitas, perdimos el liderazgo turístico que ya Cuba gozaba en 1959. Claro que en aquella época, a pesar de que había grandes casinos en la Habana, nunca se había desarrollado la prostitución al nivel que lo generó Fidel Castro con su política de doble moneda, que abrió entre los cubanos la mayor brecha de desigualdad ilógica entre los cubanos. Pues con esa política de Fidel Castro se logró el absurdo social que un camarero, un botones de un hotel o un taxista tuviera una economía muy superior a un médico, un ingeniero o un maestro.
Ya mucho antes había acabado con la agricultura cubana cuando al repartir la tierra a los campesinos les quitó el derecho a comercializar libremente sus productos, tenían que venderlo al gobierno a los precios que ellos fijaban, querían evitar que los campesinos se enriquecieran y lo que lograron fue empobrecer al país. Y luego los planes locos del Comandante en Jefe: Para hacer el Cordón de la Habana derribaron miles de árboles frutales en el sur de la Habana. Crearon los famosos Contingentes de la agricultura que fueron un rotundo fracaso productivo. Y ahora el heredero del trono se complace en insultar a los cubanos de que son vagos y no quieren trabajar la tierra.
Este 3 de agosto, día en que Fidel Castro cumple 83 años es un día muy triste para Cuba. El Fantasma de Jaimanitas agoniza tranquilo en su lecho d muerte sin haber tenido que responder por sus incontables delitos ante un tribunal. Pero no hay dudas: LA HISTORIA LO CONDENARA.
Nota: pueden leer el artículo al que me refiero en http://www.granma.cu/espanol/2009/agosto/mier12/30turismo-e.html

A estas alturas están diseñando un nuevo modelo económico.

Que después de 50 años, a estas alturas tengan la cara de decir que están diseñando un nuevo modelo económico me suena un poco desvergonzado. Me incita a preguntar: ¿Qué han estado haciendo durante este medio siglo?

Pero, no solo eso, persisten que dicho hipotético ¨nuevo modelo¨ debe tener las mismas características del que actualmente los ha llevado al fracaso: El privilegio de un partido único en la dirección de todos los aspectos de la vida de la sociedad y sin el aval de haber hecho nada bien en 50 años. Pretenden que Cuba siga siendo un coto privado de unos cuantos que además no tienen porque preocuparse por ganarse los privilegios que le permite disfrutar ese estado de cosas.

En ¨nuevo modelo¨ quiere garantizar que los ciudadanos tengan la boca cerrada, que no puedan expresar libremente sus ideas, que esperen como siempre que de arriba, de las alturas lleguen las soluciones, las iniciativas, el reconocimiento de los errores, en fin que la población tenga categoría de ciudadanos de segunda clase; porque no pueden exigir otra alternativa para hacer avanzar a la sociedad.

Raúl Castro debe tener en cuenta que el pueblo cubano se siente frustrado y traicionado y exige cada día más que la nomenclatura irresponsable se acabe de largar y nos permita a todos los cubanos comenzar a reconstruir la Patria que nos han destrozado.

El Pueblo de Cuba le ha pasado un ultimátum a Raúl Castro: Resolver los problemas que la dictadura le ha creado al pueblo de Cuba, no es un juego. Estamos al borde de una explosión social espontánea y sangrienta y ellos son los responsables. La dictadura conoce que el país no funciona, sabe que las medidas de las que está hablando tampoco van a hacer que el país funcione. Ahora debiera acompañar a sus iniciativas el pacto que una vez hizo, cuando como los nazis de Alemania, hicieron pactos de suicidios colectivos si fracasaban sus planes. Pero una cosa les debe quedar bien clara: EL TIEMPO QUE LA HISTORIA LES HA DADO PARA SACAR AL PAIS DEL HUECO EN LO METIERON SE HA ACABADO.

En 50 años nunca han dado una buena noticia.

Los cubanos estamos cansados de lo mismo. Tener un mismo gobierno durante 50 años que no puede exhibir un solo éxito económico es traumático. Anuncio de nuevos planes, reclamos al sacrificio de los de abajo y cuando es el momento de presentar resultados, de nuevo buscar un culpable externo y ajeno. Y ni un solo cambio, nunca se reconocerá un error propio. Y de nuevo a esperar. Son muchas las veces que las mismas personas han dicho que ahora si se va a avanzar, pero de nuevo los mismos métodos, las mismas ideas descabelladas y de nuevo los mismos fracasos. Eso cansa a un pueblo.

Ahora amenazan con nuevas tuercas a apretar. En ningún momento se le da la posibilidad a los ciudadanos de que desaten sus energías emprendedoras. Cuba necesita resolver muchos problemas, pero si los ciudadanos pudieran desarrollar su creatividad libremente, de seguro que muchos problemas encontrarían solución. Pero ante todo persisten en mantenerle a la población las manos atadas y la boca cerrada.

La dictadura sabe que está en su etapa final. Un Fidel Castro moribundo, alejado de la realidad, pero que se mantiene aferrado al poder desde su cama de moribundo. Un heredero elegido por su hermano, pero que carece del carisma y la inteligencia de él y que para colmo ha sido desautorizado y ridiculizado internacionalmente por su propio hermano. El mismo que castiga severamente a los que no creen en su posibilidad de sacar al país adelante, no le pierde ni pie ni pisada.

Ahora culpan a la Crisis Económica Internacional, pero se olvidan que han mantenido al país en una crisis económica durante 50 años. Enumerar los fracasos de tantos años es una tarea complicada y aburrida. Pero lo que está claro es que el sistema de monopolio estatal creado es ineficiente e incapaz de resolver los problemas de la sociedad. Los ciudadanos no confían en los gobernantes. Tampoco tiene confianza en la alta dirigencia los escalones de mando intermedio. La NOMENCLATURA vive aterrorizada. Sabe lo que hay que hacer para sacar al país del hueco, pero sabe que los ancianos históricos no tienen interés en la labor y no van a permitir cambios hasta que se acaben de morir.

Así las cosas, la población cada vez está más desilusionada y la posibilidad de una explosión social espontánea cada vez está más cercana. Raúl Castro pudo desmontar la dictadura, hacer cambios democráticos y quitarse el clavo caliente que su hermano le dejó en la mano y al rojo vivo. Pero ha perdido tres preciosos años y lo peor de todo es que ha sustituido a civiles sin poder real de cargos importantes para colocar en su lugar a generales y altos oficiales del ejercido (que si tienen poder real sobre tropas y dinero en mano) y que también se dan cuenta que no tiene la inteligencia y la capacidad de su hermano para mantenerse en el poder.

Internacionalmente, la sucesión se ve como un fracaso y los gobiernos extranjeros se dan cuenta que no se puede seguir negociando con un país en que su gobernante no tiene poder real para decidir. Así están las cosas.

Tres años con Raúl Castro.

Un discurso soso, hablando de logros que nadie ve por ningún lado y con datos mal inventados, pues son de dudosa credibilidad es lo que recibieron los cubanos en este 26 de julio.

Acopiar 400 millones de litros de leche el año pasado, como dijo en ese discurso, en un país de poco más de 11 millones de habitantes nos da un percápita de 36 litros de leche por cubano, si suponemos 3 millones de niños nos daría 133 litros de leche por niño al año. ¿a dónde fueron a parar? Nadie ve por ningún lado ni esa ridícula producción. Los cubanos merecen un poco más de respeto.

Con la tranquilidad que habla de las famosas tierras entregadas, como su hermano habla de lo que han sembrado, pero los cubanos esa historia ya la conocen bien de su hermanito moribundo, muchas cifras de lo sembrado, pero de lo recogido ni palabra. Pero no son palabras lo que necesita la gente, la gente necesita ver esos productos en el mercado.

Vuelve con la letanía del bloqueo económico y las múltiples agresiones del Imperialismo concebidas según él para impedir el desarrollo de la nación. Y se salta el portazo que le dio su hermano a los gestos de Obama para mejorar las relaciones entre Cuba y EEUU.

Como es lógico no explica porque su gobierno no está dispuesto a ayudar al gobierno de Obama para levantar el Embargo. Ellos saben que el Embargo es una Ley que se aprobó en el Congreso de los EEUU en los años 60 y fue la culminación de una política del actual gobierno cubano con el gobierno de los EEUU de aquella época en que todos los días ambos gobiernos hacían gestos hostiles. Nacionalizaciones de Industrias, suspensión de suministros petroleros, invasión de soldados soviéticos a espalda de la Constitución de la República de Cuba, incluso instalación de mísiles apuntando al territorio norteamericano y con cabezas nucleares.

Obama dio el primer paso, empezó con gestos amistosos: eliminó las restricciones de viajar a Cuba a los cubano-americanos y el envío de remesas a sus familiares a Cuba, les puso la pelota en su terreno, tocaba a Raúl Castro hacer gestos de buena voluntad, como liberar a los presos políticos cubanos. Pero de eso nada, pusieron sin hacer ningún gesto más, como primer paso de los EEUU la liberación de los 5 espías cubanos que fueron cogidos con las manos en la masa cuando ayudaron a escapar a Cuba a un piloto infiltrado por ellos en la Organización de Hermanos al Rescate, pocos días antes de que se hubieran decidido a derribar en pleno vuelo, cuando se alejaban del territorio cubano dichas avionetas de matricula norteamericana, como una provocación de Fidel Castro para lograr que el Presidente Climpton firmara la Ley Helm-Burton.

Yo soy del criterio que esos espías solo cumplían ordenes de la Habana y que en un momento deben ser liberados para llevar a los tribunales a los delincuentes autores intelectuales de estos crímenes. Pero eso pudiera ser cuando Cuba esté caminando por senderos serios de transición a la democracia.

Algo me pareció una referencia a Yoani Sánchez, cuando en uno de sus post pedía que alguien con respuestas diera la cara, cuando dijo: mientras exista alguien esperando respuestas. Pero lamentablemente no dio la cara.

Vamos a ver, tres años es un buen periodo de tiempo para ver resultados, en los EEUU es el 75 % del mandato de un presidente. No se puede ser tan ligero y a tres años de gobierno no ha resuelto ni uno solo de los problemas que el mismo declaró que existían.

La opinión de que Raúl Castro es incapaz para sacar a Cuba del hueco en que metieron su hermano y él, en este discurso sale reforzada. Solo no opinan así Lage y Pérez Roque. Así estoy seguro que opinan muchos de los generales que a convertido en Ministros, que quizás son más astutos y no hacen declaraciones tontas ante micrófonos puestos por los segurosos. Lo que si está claro es que la sucesión ha sido un fracaso y los cubanos debemos seguir esperando.

Pero la política de Obama ha sido un éxito: Primero: porque demostró la voluntad de los EEUU de dar pasos serios para la solución del diferendo Cuba-EEUU. Segundo: dejó claro a los gobiernos de la Unión Europea que las autoridades cubanas no les interesa crear condiciones de distensión para propiciar el levantamiento del Embargo. Tercero: el Presidente Obama se ha ganado la simpatía de los cubanos que viven en la isla y hoy es más popular, creíble y querido que cualquiera de los Castros. Cuarto: le ha dado una estocada estratégica a la sucesión en Cuba, cuando provocó que Fidel Castro desautorizara a su hermano en aquella ridícula ´reflexión¨ donde decía que Obama no había entendido lo que dijo su hermano en Venezuela, diciendo que no dijo lo que dijo. Obama no hizo ninguna declaración sobre esto, pero de su actuación posterior se saca el convencimiento de que ante un gobierno bicéfalo Cuba no tiene un Presidente con poder para poder conversar con él y llegar a acuerdos y hay que esperar.